El limpiador de alta presión suele ser muy adecuado para aflojar y suavizar la suciedad persistente antes del lavado del vehículo. Antes de usar un limpiador de alta presión, se puede rociar limpiador de llantas y agentes especiales para eliminar insectos. Sin embargo, se debe tener cuidado de no utilizar productos agresivos a base de ácido.
Consejos para un cuidado óptimo del vehículo
Para no dañar la pintura, la lanza de alta presión nunca debe apuntar a menos de 30 cm de la pintura. Especialmente ahora, en verano, es recomendable no limpiar el automóvil directamente con la neblina de spray si estuvo parado bajo el sol abrasador. Debido a los rayos del sol, el parabrisas puede calentarse mucho y, en el peor de los casos, puede producirse una fisura por tensión. Por lo tanto, primero deje que el automóvil o el interior se enfríen en un lugar con sombra.
Si utiliza el programa de lavado con espuma, debe volver a enjuagar bien el vehículo con agua desmineralizada. Esto evita las manchas de agua. Sin embargo, si se incluyen agentes químicos en el programa de brillo, una capa de este producto puede asentarse en el vehículo y limitar o evitar por completo la formación de gotas hasta el próximo lavado del vehículo.
Use un paño de microfibra para secar el vehículo. Estos no se rayan en comparación con un cuero tradicional. En primavera y verano es recomendable utilizar una cera en spray/limpiador rápido para secar mejor el coche, ya que de lo contrario el polen y el polvo pueden provocar microarañazos. Los labios de silicona para limpiar el agua generalmente no se recomiendan para vehículos exclusivos.
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